Para Semira lo más importante de su vida eran sus hermanos y para protegerles a ellos y a sí misma, haría cualquier cosa.
Incluso ser una de las elegidas del rey y pasar a ser de su propiedad durante dos años. Eso le proporcionaría las suficientes riquezas para sobrevivir el resto de su vida.
Pero el regreso de Rucer a su aldea, provocaría que dudara en si estaba haciendo lo correcto.