Una historia de amor entre dos outsiders lo
bastante inteligentes como para saber que el primer amor nunca es para siempre,
pero lo suficientemente valientes como para intentarlo.
-Bono
conoció a la que sería su mujer en el instituto -dijo Park.
-Sí, y también Jerry Lee Lewis -contestó Eleanor.
-No estoy bromeando.
-Pues deberías. Tenemos 16 años -dijo Eleanor.
-¿Y qué pasa con Romeo y Julieta?
-Superficiales, confundidos y, posteriormente, muertos.
-Te quiero, y no estoy bromeando -le dijo Park.
-Pues deberías.
Eleanor es
nueva en el instituto; su vida familiar es un desastre; con su intenso pelo
rojo, su extraña y poco conjuntada forma de vestir no podría llamar más la atención,
aunque se lo propusiese.
Park es un
chico mitad coreano; su vida familiar es tranquila; no es exactamente popular,
pero con sus camisetas negras, sus cascos y sus libros ha conseguido ser
invisible.
Todo
empieza cuando Park accede a que Eleanor se siente a su lado en el autobús del
instituto el primer día de clase. Al principio ni siquiera se hablan, pero poco
a poco comparten sus hobbies y empiezan una relación de amistad... para
terminar enamorándose de la forma en que te enamoras la primera vez, cuando
eres joven, y sientes que no tienes nada y todo que perder.